Jáuregui, un compañero para recordar…

por Elena Luz González Bazán*

Juan Jáuregui es un trabajador asesinado durante los tiempos de plomo, puede parecer un nombre más para sumar a esa larga lista que muestra el genocidio de una etapa política de nuestro país, que a su vez, se suma a otros momentos, procesos históricos cubiertos de masacres contra los trabajadores.

Juan Martín Jáuregui, es un deber rescatar su historia, nombre y figura, rostro y presencia militante, para incluirlo en la memoria colectiva donde están los hombres dignos. Presencia imprescindible y necesaria, mostrarlos, que existieron, para además, contraponerlos a mediocres, profanos y arrepentidos.

Juan Martín Jáuregui tiene un apellido que se corrobora con otro luchador, en este caso, Emilio Jáuregui, trabajador de prensa. A su vez hay otros nombres de las propias entrañas del Movimiento Obrero Argentino y del Movimiento Revolucionario 17 de Octubre, en particular, como Gustavo Rearte, que han sido sepultados por sirios y troyanos, para evitar que los ejemplos sean imitados y corroborados como algo humano y natural. Estamos hablando de dirigentes sindicales en distintos espacios de participación. Ellos son una bofetada diaria a los burócratas de todos los tiempos, deliberadamente sumergidos en el ostracismo, este olvido deliberado sirve para que una sociedad sin necesidad de inventario siga afirmando que todos los dirigentes sindicales son corruptos.

Juan Martín Jáuregui murió con valor, entregó lo más precioso de su existencia humana, su vida… fueron 36 horas de lucha en aquella noche del 17 al 19 de octubre de 1975, que día, 17 de octubre… Jáuregui, solo, afrontó la embestida policial y militar, volaron la UB (Unidad Básica), esa fue la forma de terminar con tanta osadía. Había sido miembro de la Resistencia Peronista, cuando lo asesinaron, seguía resistiendo…

Rescatar a un obrero, a un trabajador es un deber de los trabajadores y trabajadoras, un honor poder escribir estas líneas del compañero que no conocí personalmente, pero que poco interesa a la hora de saber que los trabajadores tuvimos un compañero y dirigente como él.

Sin tapujos, sin medias vueltas, afirmaba, en su diario el 7 de septiembre de 1975: "Una vez más la solidaridad de los trabajadores demuestra de que manera, aun sin que las mismas, en muchos casos, pueda definirlo como una conciencia de clase unida potencialmente en la practica de nuestra clase obrera".
En su último discurso hablaba en la clausura del Congreso celebrado por el MR17, bajo la presidencia honoraria del compañero Gustavo Rearte, que se denominó “Mártires de la lucha popular”.

“No es para mí por cierto tarea fácil ni sencilla, pero como tarea política confiada por todos los demás compañeros congresales la asumo con humildad militante y trataré de reflejar en mis palabras el contenido de este congreso, y el contenido ideológico y político sobre el que se fue cimentando el desarrollo que en un proceso fue logrando en nosotros estados de conciencia, hasta ponernos en condiciones de asumir desde nuestra militancia como peronistas a secas primero y desde nuestra militancia como peronistas revolucionarios después, los principios marxistas, como una guía, para la acción a través de lo que concebimos la necesidad de comenzar la construcción de un partido obrero revolucionario, con todas las organizaciones que estén dispuestas a realizarlo".

En la sencillez de su discurso muestra su identidad como peronista y como peronista revolucionario que abreva en su clase para cambiar las formas explotadoras del sistema actual. Un discurso que en la actualidad puede ser lejano, sin embargo tiene actualidad para pensar cómo desde el poder dominante se dirigió la artillería pesada para destruir al Movimiento Obrero Argentino.

"Un partido obrero revolucionario que, partiendo de las experiencias de lucha de nuestra clase trabajadora, le sirva a ésta no sólo para identificarse como clase sino que además le sirva para que desde su seno los destacamentos de avanzada, vanguardias revolucionarias del proletariado, puedan concebir, organizar, desarrollar y conquistar la liberación nacional y social de nuestra clase trabajadora y por consecuencia el principio de la Patria Socialista para nuestro pueblo".

Jáuregui es claro, preciso, la Patria será libre cuando se conquiste la Liberación Nacional y Social de la clase trabajadora y se conquiste un anhelo por el cual dejó su existencia, la realización de otra sociedad más justa, libre y soberana.

Homenajear a Juan Martín Jáuregui es, simplemente, parte de un agradecimiento manifiesto, poder acercarme a él a partir de su diario y discursos…

* Periodista, investigadora y docente. Especialista en niñez y mujer.
Secretaria de prensa del Movimiento Nacional por la Recuperación de Ferrocarriles Argentinos (MONAREFA).
Delegada de base en el Instituto Nacional para Jubilados y Pensionados, gremio de Comercio y Bancarios.